Mayo 20 - 25, 2013
Esta semana hubo dos situaciones especiales que quiero compartir con ustedes. La primera se desarrollo el miércoles 22. Mike y Jim, pastor de misiones y pastor asociado respectivamente, nos invitaron a Vicente y a mi para almorzar con un pastor de una iglesia afroamericano. El pastor que se llama Isaías quiere alcanzar la comunidad latina que hay al rededor de su iglesia. Queria reunirse con nosotros para que le pudieramos dar algunas ideas de como hacerlo. – He aprendido que uno se ahorra muchos dolores de cabeza y recursos consultando a personas que ya están o han hecho lo que uno pretende – dijo Isaías. (Lo cual es una gran verdad. Debemos aprender de esto).
Desde que nos dirigíamos a la reunión, iba orando porque Dios pusiera las palabras correctas en mi boca y me permitiera ser instrumento suyo para ayudar a este pastor. Llegamos y seguía orando dentro de mi. Estuvimos compartiendo un poco con él y sobre su iglesia y conociendo el contexto de la misma y como había surgido la visión de alcanzar a esta comunidad. Mientras Mike le daba algunas sugerencias en base a lo que True North hace, mencionó a una pareja de esposos. De repente, Jim dice – ¡Mira! ahi están Luis y María – Los invitaron a sentarse con nosotros y sucedió lo extraordinario. Luis es de origen latinoamericano con vasta experiencia en el desarrollo y capacitación de liderazgo.
Luis comenzó hablar con el pastor Isaías y en cuestión de minutos le dio todas las claves estratégicas para alcanzar a la comunidad, además de hacer teología ahi mismo en la mesa. Discutiendo sobre lo simple que es dejar que sea el Espíritu Santo sea quien obre a través de nosotros. El pastor no paraba de decir – wow, wow, wow... – hubo muchas verdades espirituales y bíblicas durante la conversación. Frente a la expresión de admiración constante del Pastor, Luis le dijo a Isaías – Este no soy yo hablando, es el Espíritu Santo, porque al final, es Dios quien me ha dado el conocimiento y la vida para compartir esto contigo – .
Ahi mismo reaccioné y me di cuenta que Dios había contestado mi oración. No me usó a mi para hablar a este pastor, sino de una manera muy especial y única, trajo a Luis para hablarle a Isaías. Así es Dios de grande. A veces Dios no te va a usar para un propósito especifico, va a usar a otras personas. No hay que deprimirse, porque al final lo que realmente importa es que el Nombre de Dios sea glorificado, y que su propósito se cumpla. En mi caso Dios me respondió. No de la manera que yo esperaba, pero respondió.
La segunda situación se dio el viernes 24. Vicente me comentó que una de las maestras que da clases de inglés en Casa de Esperanza (la casa que True North tiene dentro de la comunidad de Gentry), le había hablado para ayudarle con un asunto. Una de las mamás de los niños de la comunidad, necesitaba ir a la escuela donde estudia su hija. Como esta por terminar el año, ella estaba preocupada de que su hija perdiera el año. Vicente y yo iríamos para ser interpretes entre la maestra y la mamá.
Llegamos a la escuela por la mañana. Rosa iba acompañada de la maestra. Entramos a la escuela y fuimos directo a la clase de maestra de su hija. Estuvimos aproximadamente una hora. Vicente hizo las preguntas precisas y oportunas para resolver las dudas de la mamá y yo iba traduciendo para Rosa lo que la maestra de su hija y Vicente iban discutiendo. Fue una verdadera bendición, porque esa pequeña fracción de tiempo fue productiva y valiosa para Rosa. Logró resolver sus dudas. Su hija pasará a 1er. grado el siguiente ciclo. Y lo más importante, esta situación nos permite seguir fortaleciendo la relación entre True North y la comunidad. ¿Le presentamos el Evangelio a Rosa? No, por lo menos de la manera tradicional. Ella sabe que somos seguidores de Jesús. Ella sabe que estamos para servirle, que somos sus amigos. Ella pudo ver a Jesús a través de nosotros.
Tus acciones, por pequeñas que sean, pueden hacer la diferencia en el concepto que los demás tengan acerca de Jesús. Dale el control de tu vida al Espíritu Santo. Permite que sea el quien dirija tu vida, porque de esa manera, podrás reflejar a Jesucristo en todo lo que hagas.